Por Noé Mondragón Norato Foto: https://enterado.mx/tag/felix-salgado-macedonio/
Pese a que existe materia jurídica para culpar o absolver al senador morenista Félix Salgado Macedonio, por el delito de abuso sexual del que se le acusa, al final de cuentas lo que está en riesgo para su causa política es que, al existir una carpeta de investigación abierta en su contra, aparece en el archivo de la Fiscalía General del Estado (FGE) con antecedentes penales. Una razón suficiente para excluirlo de la competencia electoral de gobernador en 2021. Legalmente, ningún partido político puede postular como candidato, a quien proyecte ese lastre. Hay que ir a los argumentos.
¿GUERRA SUCIA O DELITO REAL? - De acuerdo con el artículo 182 del Código Penal del Estado de Guerrero, se establece una pena de cuatro a ocho años de prisión y cincuenta a quinientos días de multa como castigo a dicho delito. Y si se cometió en el 2016, entonces fenece hasta el año 2022, que deriva de la suma de los cuatro y ocho años de cárcel, divididos a la mitad. De acuerdo con especialistas en Derecho si la violación es agravada ―es decir hubo golpes y lesiones― el asunto se torna más complicado porque puede emitirse incluso, una orden de aprehensión. Pero el rumbo que han tomado los acontecimientos revela no solo el inicio de la guerra sucia rumbo a la competencia por el gobierno estatal, sino un mar de mentiras ocultas:
1.- En la Fiscalía General del Estado (FGE) se pudo armar la trama. O en su defecto, el delito de abuso sexual existe. Es real. Y los adversarios de Félix esperaron el momento clave para soltarlo. Lo curioso del asunto es que la carpeta de investigación número 12030270100002020117 reposa en el Ministerio Público sin ejercerse ningún tipo de acción contra el legislador federal. A pesar de que el Congreso de la Unión aprobó la desaparición del fuero constitucional en la sesión del pasado 27 de marzo de 2019. Y no existe ningún impedimento legal para proceder penalmente contra senadores, diputados federales y hasta el presidente de la república. Desde luego, siempre y cuando se demuestre la culpabilidad del acusado.
2.- Los detalles son los que perturban: el senador morenista zacatecano Ricardo Monreal, apareció ayer exonerando al senador guerrerense de todo delito. Exhibió una carta de no antecedentes penales emitida por la Fiscalía General del Estado (FGE) y fechada en 2020, a favor de Salgado Macedonio. Pero con una buena relación al interior de esa dependencia y apelando a los tráficos de influencias, ese documento se puede conseguir con relativa facilidad. Y existe un principio jurídico fundamental: el que es primero en tiempo, es primero en derecho. Si el delito fue cometido presumiblemente en 2016 y la denuncia ratificada en 2017, entonces la quejosa tiene la ventaja. Máxime si demuestra que el senador pudo presentar una carta de antecedentes no penales apócrifa, para salir bien librado de la acusación.
3.- En este lodazal, la FGE tiene una participación clave. Primero, el fiscal Jorge Zuriel de los Santos Barrila guardó un sospechoso silencio con relación a la carpeta de investigación por abuso sexual contra Félix. Y luego, este enmudecimiento lo repitió ayer cuando el senador Monreal presentó la carta de no antecedentes penales emitida por la FGE a favor de Félix. ¿Por qué si es la dependencia gubernamental responsable de dar trámite y resolver las denuncias por delitos del fuero común, ha callado deliberadamente? ¿Es que no puede desmentir ni a la víctima ni al victimario? ¿Confirma con ello que el asunto está ya contaminado, al politizarse en la coyuntura electoral?
4.- Está claro que, si Félix resulta exonerado de todo este embrollo y llega como hipotético candidato a gobernador, el asunto del abuso sexual lo perseguirá a lo largo de toda su campaña electoral. Sobre todo, de los grupos radicales de feministas que lo percibirán con recelo y desconfianza. Sin demostrarse legalmente su culpabilidad o su inocencia, el llamado Toro sin Cerca quedó tocado de muerte. El triunfo electoral que vaticinaba con cierto aire de arrogancia y autosuficiencia, se difuminó. Irremediablemente. Ya no es lo mismo.
HOJEADAS DE PÁGINAS… El diputado local del Morena, Antonio Helguera Jiménez, voló como los papalotes: solo. Y se `destapó´ como un aspirante más para la candidatura a gobernador por ese partido. La fiebre del poder lo marea y los hace perder piso. Porque como presidente de la Junta de Coordinación Política, Helguera nunca comprobó casi cien millones de pesos por concepto de “ahorros legislativos”. ¿Con ese plus cree volver a ganar una elección tan importante? En realidad, busca asumir como bisagra política para cerrarle la puerta a Pablo Amílcar Sandoval, con quien está confrontado.
Hay 506 invitados y ningún miembro en línea