Por Emilio Bustos Aguilar Foto: http://costachicanuestra.blogspot.com
Aunque parezca mentira, es considerable la aportación de los afroamericanos a la cultura universal y en especial a la americana.
Sin ser erudito en el asunto, me atrevo a ejemplificar algunas poesías que el costeño utiliza cuando tiene la oportunidad de hacerlo de manera especial en sus convivios.
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CULTIVO UNA ROSA BLANCA.
(José Martí)
En julio como en enero,
para el amigo sincero
que me da su mano franca.
Y para el cruel que me arranca
el corazón con que vivo,
cardo ni ortiga cultivo:
cultivo una rosa blanca.
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COPO DE NIEVE.
(Salvador Díaz Mirón)
Para endulzar un poco tus desvíos
fijas en mí tu angelical mirada
y hundes tus dedos pálidos y fríos
en mi oscura melena alborotada.
¡Pero en vano, mujer! No me consuelas.
Estamos separados por un mundo.
¿Por qué, si eres la nieve, no me hielas?
¿Por qué, si soy el fuego, no te fundo?
Tu mano espiritual y transparente,
cuando acaricia mi cabeza esclava,
es el copo glacial sobre el ardiente volcán cubierto de ceniza y lava.
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DESPECHO
(Antonio Plaza)
Nunca al poder ni al oro me arrodillo,
y aunque me agobie el padecer tirano;
me muero de hambre, pero no me humillo...
Seré cadáver, pero no gusano.
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A MARÍA DEL CIELO.
Aquí me tienes a tus pies rendido
y mi rodilla nunca tocó el suelo;
porque nunca Señora, le he pedido
amor al mundo,
ni piedad al cielo.
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DICHOS DE LA COSTA.
A mis palomas les dije
que ya no las mato yo,
porque una cosa me aflige
que aunque yo quiera ¡ya no!
se me descompuso el rifle
y el parque se me acabó.
Enamoré a una catrina
con miras al casamiento,
y me reclamó la endina
"a usted se le pasó el tiempo"
pa'tocar las golondrinas
ya no sirve su instrumento.
Para asegurar mi vida
me enamoré de la muerte,
y tuve tan buena suerte
que actualmente es mi querida,
me considero hombre fuerte
porque la tengo parida.
Como me gusta Francisca
la sobrina de don Diego;
porque cuando la enamoro
me dice que luego, luego;
cuando ella se pone bizca,
yo me estoy poniendo ciego.
Dejo a los instruidos el análisis de las anteriores composiciones en los que reina la ironía y picardía del hombre costeño, porque quieras o no, como ya lo dije, estas ocurrencias ya son parte del acervo de la cultura hispano - afroamericana.
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