En la crónica del adiós anunciado de las izquierdas, el desenlace del affaire se antoja incierto, aunque de ninguna manera éstas han sido derrotadas. Hay huérfanos por la defección, aunque también hay arquitectos de la construcción de la unidad de un partido de la izquierda que camina rumbo a la institucionalidad de la mano de la social democracia. Los hechos de las últimas semanas nos dejan atisbar a un proceso evolutivo que no necesariamente debilitará a las izquierdas en México. Éstas saldrán fortalecidas.
Andrés Manuel López Obrador a nadie engañó. Desde el mes de julio pasado Francisco Garfias, de Excelsior, filtró la especie de un adiós pactado entre el grupo de AMLO y el PRD. El hecho se ha consumado y nadie se puede decir engañado. Tal vez los huérfanos del divorcio lamenten la pérdida de miles de votos que les representó acompañar López Obrador en dos elecciones presidenciales. PT y Convergencia penden de un hilo. Sus registros ante la autoridad electoral también, lo mismo que los millones que reciben por concepto de prerrogativas.
Los gobernadores aliancistas, lo mismo que quienes ganaron la elección el mismo día que Andrés Manuel perdía la propia, han marcado distancia. Una vez con el triunfo en la bolsa fueron Ángel Aguirre y Graco Ramírez quienes iniciaron pláticas en la ciudad de México con gente de Marcelo Ebrard para lograr lo que, en Acapulco, se llevó a cabo como “La Cumbre de la Izquierda”. Desde entonces fue sellada la salida pactada de AMLO para comenzar la construcción de la institucionalidad perredista. ¿Recuerdan la llamada de Cuauhtémoc Cárdenas para dar fin a las tribus y caminar a un partido mas institucional con un solo grupo fortalecido?
El PRD no sufrirá una hecatombe. No habrá éxodo a otros partidos ni la deserción será masiva. Hay muchos regidores, síndicos, alcaldes, diputados locales, diputados federales, senadores y gobernadores que no seguirán a López Obrador cual flautista de Hamlet. El dicho dice que jalan mas un par de tetas que un par de carretas. ¿Qué el poder no jala igual? Claro que si.
El PRD atraviesa lo que en su momento, por allá de los años treinta, experimentó el Partido Nacional Revolucionario: su paso a la vida institucional. ¿Creen que son ingenuos quienes ya tienen en la bolsa poder, dinero e influencia, a cambio de una quimera? Por supuesto que no. Darán el paso a la conservación del poder. No lo soltarán.
La salida de AMLO, como lo han planteado Manuel Camacho Solís y Alejandro Encinas, tiene que ver con la construcción de un Frente Amplio de Izquierdas cuyo contexto legal no necesariamente será el de las instituciones electorales que conocemos. Muchos pierden de vista que las candidaturas ciudadanas son un hecho y que por ahí del mes de diciembre serán reglamentadas, para ser implementadas por primera vez en México dentro de tres años. Y es para allá a donde va AMLO. No seamos ciegos.
Lamentable para los partidos del Trabajo y Movimiento Ciudadano, antes Convergencia, porque ellos, y lo que representan, son los grandes perdedores del proceso electoral. AMLO se va fortalecido con una gran base popular que lo respaldará en su Frente Amplio de Izquierda y los gobernadores del PRD se erigen como la nueva y mas fuerte tribu al seno del perredismo.
Hace doce y seis años los gobernadores del PRI fueron paradigma para la construcción de una candidatura presidencial ganadora. Hoy el PRD tiene en sus gobernadores el mismo escenario. ¿No son ellos quienes tienen recursos para respaldar a su partido? En esa disyuntiva está el PRD y, en esa coyuntura, el gobernador de Guerrero tuvo mucho, pero mucho que ver. ¿Cuál hecatombe? Digamos a los agoreros: El PRD que vos matáis goza de cabal salud.
TRASCENDIÓ
QUE regidores de Acapulco de PRD y PRI hacen cuentas con los dedos y han caído en cuenta que, juntos, son mayoría aplastante en el cabildo que rendirá protesta el último minuto de éste mes.
QUE, sin embargo, no están ni unidos ni tendrán calidad moral para impugnar a la naciente administración. Por ejemplo: fue la esposa de un poderoso regidor electo del PRI la que encabezó (y se atreve a negarlo a pesar de fotos y videos) el saqueo de las oficinas del DIF en Acapulco.
QUE fueron camionetas con el logotipo de una empresa llamada Sahuayo la que llegó el sábado pasado, a partir de las tres de la tarde, a las oficinas en la colonia Hogar Moderno y no solo se llevaron mochilas, sino medicamentos, despensas, mobiliario, sistemas de cómputo y lo que les pareció con valor económico. Dicen que se les acusó de robo. Para nada. Nomás se dijo lo que los empleados atestiguaron: una expropiación al DIF.