Se me hace increíble que los empresarios textileros no tengan la capacidad de organizarse y hacer frente a la demanda gubernamental en cuanto a los uniformes escolares. El fin del año escolar se acerca y el siguiente se aproxima.

El magisterio disidente presiona para obtener prebendas en tanto los empresarios reclaman que los recursos económicos se queden en Guerrero para reactivar la economía. A penas el año pasado quienes levantaron la voz fueron los empresarios papeleros, se quejaron de la compra de útiles escolares.

Los cuadernos, lápices y mochilas los trajeron de otro lado. La falta de inversión de las empresas privadas y el incentivo oficial para comprarle a los guerrerenses ocasiona otra inconformidad, desesperación y seguro una movilización. El reclamo el incentivo a los empresarios locales, que se les compren sus productos, ellos tienen la capacidad de enfrentar la demanda hasta en un 80 por ciento. Hablamos de uniformes escolares, mochilas, cuadernos, lápices.

Son 90 millones de pesos que se invertirán en esta ocasión para que los niños reciban uniformes que no son de su talla y transparentes. Hasta el momento no hay marcha atrás de que quien coordinará los trabajos y determinará la compra, será una empresa foránea autorizada para revisar la calidad de las telas que ocupen y presenten las empresas guerrerenses. Además de eso determinará el pago por volumen o de manera unitaria.

Esta situación han generado la inconformidad de los textileros de Guerrero que reclaman un trato justo e igualitario y además el cumplimiento de la palabra empeñada de que las compras de material y la confección de los uniformes serían un detonante importante para generar empleos y apoyar a las madres solteras…

Lamento en verdad que los empresarios textileros no tengan la capacidad, primero para organizarse y participar en una licitación y segundo no contar con los materiales suficientes para enfrentar la demanda no solo del gobierno sino de la población, se confeccionaran 85 mil uniformes.

A esta inconformidad ya se sumaron varios líderes empresariales y piden cumplir que los uniformes escolares se confeccionen por manos guerrerenses. Sin embargo el asunto irá más allá si ya entregaron el contrato por segundo año consecutivo a una empresa foránea sin que esta empresa se evaluara o participara en alguna licitación, dicen que le entregaron 90 millones de pesos en adjudicación directa. Ahora ya nació la Asociación de maquiladores del Estado de Guerrero (MEG). La otra parte, la que no se ve es que son más de 2000 familias que necesitan este trabajo. Y mantienen la esperanza del cumplimiento de la palabra empeñada.comentarios:Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.