Los poderosos intereses de la derecha española han ganado una batalla. Inhabilitaron al juez Baltazar Garzón quien, entre otras cosas, nos dejó creer que hubo un tiempo en el que la esperanza cobraba certeza. Enjuició a dictadores sudamericanos, logró condenas a sus crímenes e iba por los abusos del franquismo. Nada. Todo ha vuelto a la triste realidad. Nuestra sociedad bebió cicuta de origen. ¿Vale ser bueno o vale defender los intereses de los poderosos?
En Tecpan de Galeana aparece Andrés Manuel López Obrador. Dice que le gusta que le digan “Peje”, pero que no es “lagarto”. Le escuchan Armando Ríos Píter, Luis Walton Aburto y un nutrido grupo de fervientes perredistas. Entre ellos centenas de aspirantes a candidaturas. “Quien les cambie una despensa por un voto es un sinvergüenza”, dice.
Crasa ignorancia. Don Andrés desconoce que en Guerrero no sólo se regalan despensas. Los perredistas que pretenden una candidatura regalan pollos (Granda), despensas (Ríos Piter), láminas y tinacos (Sofío), consultas médicas (Rafa Aguirre), pintura para casas (Astudillo) y hasta una tarjeta cumplidora que jamás cumplió: la que obsequió el hoy gobernador como esperanzadora llave que solucionaría todos los problemas de los pobres no abrió siquiera una ilusión. Fue mentira tóxica que cambió el sentido del voto. Tan sólo eso.
En otro escenario nueve priístas levantan sus manos en señal de triunfo. Otros tantos perredistas hacen lo mismo. Tienen una lucha común: los genuinos militantes luchan en contra de las decisiones de “allá arriba”.
En el PRI imponen lo mismo a un secretario de finanzas que destruyó periódicos a base de asfixias económicas y se escondió tres años tras las cortinas del poder. Jamás dio la cara. Hoy resulta que será candidato a diputado federal por encima de un líder campesino o el dirigente estatal del sector popular de su partido. Veneno puro.
En el PRD Eloy Cisneros Guillén, otra vez cuesta arriba, lucha contra “los de arriba” que cual sanguijuelas tóxicas o tapetes repletos de polilla pretenden la imposición de un hermano del gobernador como candidato a diputado federal en Acapulco. Veneno que destruye la cultura del esfuerzo a golpes de la cultura del privilegio. ¿Elixir? ¿Cicuta? ¿Arsénico?
Podemos soportar que 709 acarreados al mitin de Sergio Dolores tengan chorro con chorrillo por comer tacos de arroz con huevo. Con una “avapena” o una buena lavativa se componen y saltarán al próximo mitin en busca del taco no comido.
Lo que no se pude tolerar es el veneno de la inhabilitación a quien puso un collar a dictadores asesinos. Tampoco se soportan las imposiciones de los que han nacido privilegiados por encima de quienes van cuesta arriba. Mucho menos la ignorancia de un “peje” que mira la despensa en el ojo ajeno, pero no ve el aparato de estado en el ojo perredista.
Para éste tipo de veneno aun no son conocidas “avapenas” ni lavativas. Quedémonos, mejor, con lo que declaman quienes conocen “Reir llorando”. “Si esa es la cura, doctor, mejor cambiadme la receta”.
NUMERALIA
1) A pesar de un aumento de 4.3 millones de internautas en 2010, el número de mexicanos que cuentan con acceso a Internet representa sólo un tercio de la población, según un estudio de la Asociación Mexicana de Internet (Amipci).
2) de los 112 millones de mexicanos, 34.9 millones son usuarios de la red, aunque en el último año el número creció 14%; en 2009 creció11%.
3) La penetración de Internet en los hogares se incrementó en 21%.
4) Los estados con el mayor número de usuarios son: el Estado de México, el Distrito Federal y Jalisco, mientras que las entidades con mayor penetración son el Distrito Federal, Baja California y Nuevo León.
TRASCENDIÓ
QUE algo pasa otra vez en Radio y Televisión de Guerrero. Las pugnas por el poder y manejo administrativo sobre la base de privilegios y amistades amenaza con un sisma en el organismo.
PREGUNTAS QUE MATAN
¿Cuántos acreedores dejó el secretario de finanzas del ayuntamiento de Acapulco, antes de irse como candidato a diputado federal? ¿Pagará deudas para conseguir votos? ¿Dejará que los acreedores le hagan mala fama y perder votos? ¿Pagará a medios los mas de 18 meses de asfixia?
QUE CONSTE
“Quien cambie despensas por votos es un sinvergüenza”. Andrés Manuel López Obrador en Tecpan de Galeana.
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