LECTURA POLÍTICA

Las mujeres han avanzado sustancialmente en los terrenos de la política. Incluso, algunas de ellas han creado verdaderos cacicazgos políticos de los que no tienen ninguna intención por desprenderse.Al contrario: en la actual coyuntura de la elección concurrente de 2012, intentan fortalecerlos. Porque al igual que los varones, les gana la ambición desmedida por el poder.Ese que los mantiene permanentemente extasiados y eufóricos bajo sus efectos. Cabe en esta descripción una fémina que ha crecido a la sombra de los tráficos de influencias ylos padrinazgos tricolores: la diputada federal Alicia Zamora Villalba.

 

LA CACIQUE DE CHILAPA.- De sencilla Directora de Recursos Humanos en la administración del ex gobernador René Juárez Cisneros, Alicia Zamora Villalba, brincó hasta la diputación local por el distrito tres en la elección de octubre de 2002. Y antes de concluir su enmienda, ya estaba anotada como candidata del PRI a la alcaldía de Chilapa en el proceso comicial de 2005, el cual ganó sin muchos contratiempos pese a que René Juárez –su mentor e impulsor político-, ya no despachaba como gobernador.

Sin embargo, y bajo esa misma sombra política, Zamora Villalbano sólo operó surelevo en aquella presidencia municipal durante el proceso electoral local de 2008-en la figura del actual edil Sergio Dolores Flores-, sino que se volvió a encaramar en el 2009 como candidata a diputada federal por el distrito seis con cabecera en Chilapa. Volvió a ganar. Las cosas se le dieron durante el estéril sexenio de Zeferino Torreblanca.

Y por esa razón y dado que la diputación federal se leacaba el próximo año, comenzó a operar en el municipio de Chilapa en dos frentes:impulsando aspirante a la presidencia municipal de ese municipio. Y gestionando en las bases tricolores de esa región de la Montaña baja, su regreso como candidata a diputada local.

Proyecta pese a todo, algunas dificultades bien identificables:

1.- Por una parte sus cuadros no levantan. Son dos personajes los que buscan la cobija de la diputada federal: Leocadio Ávila Palacios, dirigente de la CNC en la región. Y Saúl Gante Carballido. Ninguno de ellos ha logrado desplazarde las preferencias tricolores al empresario de la construcción Miguel Cantorán Gatica, quien ya se convirtió en verdadero dolor de cabeza para la legisladora priísta.

2.- Zamora enfrenta no solo la sombra acechante deCantorán Gatica, sino también las embestidaspolíticas del actual edil chilapeño, Sergio Dolores Flores. Este personaje impulsa como su relevo en la alcaldía, al actual diputado local por el distrito tres, Francisco Javier García González, cuyo trabajo legislativo es desconocidoen el distrito por el cual fue elegido. Si Miguel Cantorán o García González, logran la candidatura a la alcaldía chilapeña, y los cuadros de Alicia quedan desplazados, significaría su primer revés político en su intento por repetir como legisladora local.

3.- En este punto tiene otra dificultad: el grupo político figueroísta tiene una factura pendiente con ella. El antecedente lo dice todo: durante la elección federal del 2006, Alicia no trabajó lo suficiente para garantizar el triunfo del actual coordinador de los legisladores locales tricolores, Héctor Vicario Castrejón, en el distrito seis. Gracias a eso, el perredista Marcos Matías Alonso se alzó con el triunfo. Los indicadores estarían apuntando hacia un eventual desplazamiento de Zamora Villalba de la candidatura a diputada local por el distrito 25.

Y la postulación en consecuencia, de Dolores Flores, un aliado político de Vicario. Si se toma como antecedente que la nueva distritaciónle cercenó el distrito tres a Chilapa, entonces la actual legisladora federal no la tendría tan fácil. Porque es evidente que el paso a la alcaldía ya se lo cerraron. Sería el primer indicio del fin a su cacicazgo político.

HOJEADAS DE PÁGINAS…La decisión de la diputada federal Claudia Ruiz Salinas, y del ex legislador federal, Rubén Figueroa Smutny, tendientea solidarizarse con el edil de Tlapa, Willy Reyes Ramos, huele a captación desimpatías yvotos y no a un mero gesto humanitario y compasivo. Porque esa actitud la debieron haber mostrado desde el momento mismo en que la Procuraduría de Justicia señaló al edil como presunto autor intelectual del crimen perpetrado contra el extinto diputado federal, Moisés Villanueva de la Luz y su chofer Erick Estrada. No cuando el desafuero promovido en contra de Willy, ya está en el Congreso local. Pero sobre todo, se aproxima la etapa de las definiciones priístasen senadurías y diputaciones federales. En política se anteponen los oportunismos.

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