Por Karla Galarce Sosa/Quadratín Guerrero
ACAPULCO, Gro., a 11 de noviembre de 2022.- Mariel, Karen y Yosh, dos jovencitas y un niño indígenas, originarios de la región Costa Chica, zona de alta marginación de esta entidad, superaron el puntaje de las pruebas de coeficiente intelectual de los mexicanos que se establece en 86, al alcanzar los 120 puntos.
Los tres fueron evaluados para que pudieran recibir una de las tres becas Mentes y Genios, de lo que se proyecta como un programa en Guerrero y que promueve el diputado local Rafael Navarrete Quezada.
Los ganadores de las becas fueron evaluados con exámenes psicométricos y evaluaciones de coeficiente intelectual, junto a 165 niños y niñas de los municipios de Xochistlahuaca, Tlacoachistlahuaca y Ometepec. Del total, fueron elegidos 11 y de este segundo grupo, Mariel, Karen y Yosh, alcanzaron las calificaciones más elevadas, lo cual les ubica como genios si se comparan sus resultados con los de las cifras que alcanzan niños y niñas de Singapur y Japón que alcanzan 108 puntos.
La noche del jueves el Club Rotario Las Brisas celebró una cena en beneficio de la Fundación Rotaría y Causas Sociales, con la cual buscan mantener las becas para los pequeños guerrerenses.
Mariel, de 17 años, Karen de 13 y Yosh de 11, tienen claro que quieren seguir estudiando hasta culminar su carrera universitaria, además cuentan con el respaldo incondicional de su familia, pero reconocen que sin el apoyo de la beca que reciben, sería insuficiente.
El beneficio consiste en el pago de clases adicionales de matemáticas, inglés, ajedrez, lectura, tecnologías de la información, ética, además se paga el servicio del Internet de sus casas, se les pagan los pasajes, se les entregan vitaminas y se da seguimiento a todo ello.
Los testimonios
La joven Elisa Mariel Montes Sánchez, tiene 17 años y cursa el tercer grado de preparatoria en Tlacoachistlahuaca. Ella quiere estudiar una carrera en química, en biomedicina, o vinculada a las matemáticas y ciencias duras. Aún evalúa sus opciones.
Siendo la hija única de un matrimonio de maestros de educación básica, tiene claro el esfuerzo que todas las familias realizan cuando apoyan la decisión de sus hijos de continuar sus estudios universitarios, de ahí su agradecimiento por la beca que comenzó a recibir.
“De mí van a tener resultados, eso se los digo, le estoy echando muchas ganas. Ojalá este programa Becas Mentes y Genios tenga soporte para que haya más beneficiados”, expresó.
Karen Monserrat Lorenzo Vargas recién cumplió 14 años y cursa el tercer grado de la secundaria. Ella es originaria de Zacualpan, municipio de Ometepec y quiere estudiar ingeniería informática, o alguna carrera relacionada con la tecnología.
Ella y su mamá trabajan en un cibercafé de Ometepec. Se percató de que, sin el apoyo de la beca, estaría enfocada trabajando en el negocio y, aunque comparte su habitación con su hermana, pues la casa donde vive no es muy grande, cuenta con una condición básica para continuar estudiando, ya que es lo que prefiere antes de jugar o salir con otras personas de su edad.
Tanto Karen como Mariel priorizan su formación profesional y han dejado “para después” lo que ha sido una constante entre las mujeres indígenas y es el de ser madres o casarse siendo jóvenes, porque aún estando preparadas, la vida para ellas es difícil.
Ambas han roto estigmas entre una sociedad machista, debido a que el ser madres y apenas culminar estudios de primaria o aprender a leer y escribir en los pueblos originarios es lo común. “Yo quiero concentrarme en mis estudios y ser alguien. Estaré feliz de alcanzar mis objetivos”, enfatizó la jovencita.
Originario de Tlacoachistlahuaca, Iván Josafat Pesares Ignacio tiene 11 años y cursa el sexto grado de la primaria bilingüe Justo Sierra. Es el mayor de dos hijos de una mujer que los ha sacado adelante prácticamente sola.
Es hijo de una instructora de Conafe y hasta el cuarto grado vivió en Ometepec, pero por el trabajo de su mamá, se mudaron a su natal Tlacoachistlahuaca.
Josh, como le dicen sus amigos y quienes lo instruyen, dijo que su pasatiempo favorito es el ajedrez, ya que debe pensar y actuar al mismo tiempo.
“Aunque puedas perder o ganar fácilmente, es divertido, me gusta, lo mismo que las tecnologías que me apasiona”, compartió.
El pequeño dijo que aunque cuenta con tiempo para pensar muy bien la carrera que elegirá, se perfila para estudiar el mar porque dijo “se conoce poco”.
¿Qué sigue?
El diputado local Rafael Navarrete Quezada explicó que Becas Mentes y Genios busca ampliar el beneficio a niños, fundamentalmente de zonas de alta marginación, ya que brindando condiciones propicias para el crecimiento, el desarrollo de capacidades alcanzará nuevas generaciones de éxito que mantengan su interés en las comunidades de donde son originarios.
La cena se llevó a cabo la noche del jueves en la terraza Tulipán del emblemático hotel Las Brisas y fue convocada por el Club Rotario Las Brisas de Acapulco, en beneficio de la Fundación Rotaría y Causas Sociales.
Mentes y Genios está proyectado como un programa para que en 2024 se lance una siguiente convocatoria y en el ciclo escolar siguiente haya otros tres niños beneficiados y que cuenten con un acompañamiento en los niveles educativos básicos hasta que concluyan su carrera universitaria.
Navarrete Quezada afirmó que, si bien es necesario modificar deficiencias en el ámbito educativo, se tiene como prioridad el brindar las mejores condiciones para estudio de los niños y jóvenes, ya que de esa manera su potencial será mayor.
“Estoy seguro de que ellos nos van a ayudar en la región de donde son, y al estado también, porque mentes como las de ellos sirven al mundo, porque las mentes brillantes existen en todo el mundo y lo que buscamos con esta beca es construirles una red más amplia de apoyo”.
Cabe mencionar que el diputado del distrito local XVI Rafael Navarrete Quezada, inspirado en la visión de su padre, don Mario Navarrete Gutiérrez, decidió impulsar, con la Fundación MNG Familias Progresando, la creación de una beca llamada Mentes y Genios, que tiene una idea: la detección de niños y adolescentes con alto coeficiente intelectual, en una zona marginada, como la Costa Chica, en Guerrero, conformada por los municipios de Ometepec, Xochistlahuaca y Tlacoachistlahuaca. Idea que germinó y con ello se logró el apoyo de otras organizaciones altruistas como lo es el Club Rotario Las Brisas que buscan mantener las becas antes mencionadas.
