El cadalso político parece llegar esta vez hasta los senadores Sofío Ramírez Hernández y René Juárez Cisneros. Aunque bien puede tratarse de una efímera llamarada de petate. La modificación a la Ley 3 de 3 es el motivo. La Coparmex local, tratando de hacerla de verdugo. Desde luego, ambos senadores están en su derecho de acudir o no, a una reunión con dichos empresarios que lleva implícito el ex abrupto. La queja y la inconformidad deliberada de los empresarios de Chilpancingo. Y se entiende: muchos de ellos militan en el PAN, el partido que se inconformó con las adiciones priístas impuestas a dicha Ley. Y que contempla que los propios prestadores de servicios también se sometan a la misma. De ahí se abren las lecturas.
SOMETERSE A “LOS CIUDADANOS”.- De entrada, la Coparmex falló en la estrategia: “invitó” a ambos legisladores tricolores a un desayuno con el fin de que expliquen los motivos por los que cercenaron la Ley 3 de 3. Pero tanto el ex gobernador, como el ex diputado local y federal y ex edil de Tlalixtaquilla no acudirán a ella. Por varias elocuentes razones:
1.- Ambos no pueden someterse a una especie de juicio sumario por parte de los empresarios de la capital, que solo representan un porcentaje mínimo del padrón electoral. Si los empresarios de verdad hubiesen empujado una idea de esa naturaleza, con el fin de obligar a los dos representantes populares a explicar el sentido y la razón de su voto en el Senado, entonces hubiesen apelado al apoyo del Congreso local. Es evidente que uniendo fuerzas tanto empresarios como representantes populares locales, René y Sofío, se hubiesen sentido presionados. Y era más fácil que acudieran.
2.- El punto de la polémica sin embargo, está en otro lado. Porque los senadores tricolores obedecieron la línea dictada por el coordinador de fracción tricolor, el viejo lobo de mar, Emilio Gamboa Patrón. Y este a su vez, la dictada por el propio presidente, Enrique Peña Nieto, quien está buscando tapar así, todas las corruptelas que le han detectado a lo largo de su sexenio. Y que comenzó con la exhibición de la millonaria adquisición de la Casa Blanca, propiedad de su esposa Angélica Rivera. Dejar pasar la Ley 3 de 3, implicaba darles armas a sus adversarios políticos para que escarbarán en otras irregularidades. Quizá peores. Por eso, es evidente que René y Sofío votaron no a favor de sus electores que los llevaron hasta esa posición; sino del inquilino de Los Pinos, que es el personaje que los provee de los presupuestos y los generosos bonos con los que han incrementado sustancialmente sus fortunas personales.
3.- El propio René Juárez, en su calidad de ex gobernador, nunca fue citado en su momento por la Coparmex, para que explicara toda la podredumbre que brotó de su administración cuando fungió como gobernador. Y Sofío Ramírez, se escudó en el padrinazgo político del ex gobernador Ángel Aguirre, para que la Auditoría General del Estado (AGE), no siguiera escandalizando mediáticamente en relación al desaseo financiero detectado por dicho órgano fiscalizador, en sus cuentas públicas cuando fungió como edil de Tlalixtaquilla. Si ambos personajes han nacido, crecido y han sido amamantados en la cultura de la corrupción. ¿Qué podían esperar los empresarios de ellos? ¿Acaso el hecho contradictorio, en el sentido de que canjearían toda su torcida formación política, por una Ley que al final de cuentas, podría terminar alcanzándolos? ¿Es que acaso los empresarios agrupados en la Coparmex buscan exhibir a dichos senadores, en su naturaleza política normal? ¿Con qué propósitos si ya conocen la madera política de la que René y Sofío están hechos? La Coparmex falló en la estrategia. Empujar un plebiscito para revocarles el mandato como senadores, era la opción. Pero al reducir sus alcances, los empresarios también buscan politizar la Ley 3 de 3. Es el mensaje que enviaron.
HOJEADAS DE PÁGINAS…La renuncia del dirigente nacional del PRD, Agustín Basave, está prevista para el próximo 2 de julio, de acuerdo a la versión de la tribu los chuchos, quienes lo reprobaron, cuando ellos ya lo hicieron desde el último lustro. Y trasciende que en el PRI, se prepara también el relevo de Manlio Fabio Beltrones Rivera y todo su equipo. Y ahí va incluido Manuel Añorve Baños, uno de los alter ego del gobernador Héctor Astudillo. Qué tal.
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