Chilpancingo, Gro., abril 30 del 2012.- Este primero de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma y con ese motivo, la Secretaría de Salud del estado dio a conocer que la entidad ocupa el lugar 23 en la incidencia casos de este padecimiento crónico a nivel nacional, siendo los niños de 1 a 9 años y los adultos mayores de 50 años en adelante, los grupos de edad más vulnerables.

La Coordinadora del Centro Estatal para la Salud de la Infancia y la Adolescencia de la Secretaría de Salud de Guerrero, Miriam Anél López Basilio, señaló que el asma afecta a personas de todas las edades, pero por lo general comienza durante la infancia.

Explicó que es una enfermedad crónica de los pulmones, que inflama y estrecha las vías respiratorias y causa periodos repetidos de silbidos al respirar, presión en el pecho, dificultad para inhalar y tos, esto con frecuencia en las noches o las primeras horas de la mañana.

Informó que durante el 2011 en la entidad se diagnosticaron 8 mil 558 casos, de estos 4 mil 789, es decir más del 50 por ciento se registraron en Acapulco, región que concentra el mayor número de población de la entidad, seguido de la región Norte, Centro y Tierra Caliente, con 1 mil 071 casos, 946 y 702, respectivamente.

La funcionaria estatal detalló que en Guerrero, los grupos más vulnerables son los niños de 1 a 9 años con 3 mil 062 casos, seguido de los adultos mayores de 50 años en adelante  con 1 mil 930, detectados durante el 2011. En el resto del sector poblacional -de 10 a 49 años- se suelen presentar algunos casos pero son con menor frecuencia. 

López Basilio comentó que aunque no se conocen las causas que originan el asma, existen factores genéticos, así como medioambientales que juegan un papel importante en el desarrollo de este padecimiento, los más comunes son: los alérgenos en espacios cerrados, por ejemplo, los ácaros del polvo y en espacios exteriores como pólenes y mohos, humo de tabaco, y productos químicos irritantes.

Otros factores desencadenantes pueden ser el frío, una emoción extrema y el ejercicio físico extenuante, así como la ingesta de medicamentos como la aspirina.

Comentó que no existe cura para el asma, aunque algunas veces los síntomas disminuyen con el tiempo, automanejo y tratamiento médico apropiado, para lo cual recomendó mantener la casa limpia, cubrir las camas con fundas "a prueba de alergias",  quitar los tapetes de las alcobas y aspirar regularmente.

Para diagnosticar si una persona tienen asma, es necesario acudir con el médico para realizar una revisión de la historia clínica del paciente, los antecedentes familiares de asma o alergias y la aplicación de un examen físico, complementado con test de funcionamiento pulmonar, tales como la espirometría; que consiste en la verificación del volumen del aire al ser exhalado por el paciente, junto con pruebas en sangre y piel, útiles para diagnosticar posibles alergias.