En la semana que termina los cinco gobernadores de extracción perredista sostuvieron un encuentro con el presidente electo de México Enrique Peña Nieto a quien el ex candidato perredista Andrés Manuel López Obrador no reconoce como ganador y acusa de fraude electoral.
En una democracia esto no debería de causar sorpresa, por el contrario nos permite observar un ejercicio de pluralidad y tolerancia institucional, porque la final de cunetas el ejercicio de gobierno debe ser coordinado entre los diferentes niveles de gobierno.
Hay que apuntar también que en una democracia los actores se sujetan a las reglas del juego, mismas que en la nuestra son pisoteadas por parte de los actores de todas las fuerzas políticas, principalmente en lo que se refiere al uso de los recursos (públicos o no) para persuadir al elector de que les favorezca con su voto.
Los gobernadores perredistas confirmaron su presencia en la toma de protesta del presidente electo, lo que representa un importante avance de convivencia política en nuestro país, cuya consecuencia lógica es un alejamiento aun mayor de López Obrador.
Los gobernadores saben perfectamente que no deben caer de la gracia del primer mandatario del país porque ello significa aumentar las penurias de sus gobernados por la falta de recursos para resolver los problemas que enfrentan.
Luego de reunirse con los gobernadores de Guerrero, Morelos y Oaxaca, así como con los mandatarios electos del Distrito Federal y Tabasco, todos ellos postulados por el PRD, Peña Nieto ratificó su compromiso de trabajar en objetivos compartidos y proyectos donde hay coincidencias para beneficio de los mexicanos, “no obstante las diferencias políticas que hoy tenemos en México y que son parte de nuestra normalidad democrática”.
Asistieron a la reunión los gobernadores de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre Rivero; de Morelos, Graco Ramírez Garrido-Abreu; de Oaxaca, Gabino Cué Monteagudo; y los mandatarios electos del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, y de Tabasco, Arturo Núñez, el Presidente electo señaló que el encuentro fue positivo y fructífero, ya que acredita el interés por atender temas en los que hay plena coincidencia, así como de lograr un diálogo constante y permanente para trabajar juntos y resolver diferencias.
La crisis de credibilidad hacia los políticos
La crisis de credibilidad que tienen los partidos políticos y los propios políticos se debe a una serie de abusos en contra de la ciudadanía.
El político es sinónimo de corrupto, tramposo, mentiroso, demagogo y todo lo que se le parezca, lucha por el poder no para el colectivo social, sino para su propio beneficio personal en perjuicio de las mayorías.
El político en el poder tiene ingresos económicos insultantes para la mayoría de la población que se debate en la pobreza extrema y que se ha acostumbrado a ver como “normal” su situación.
Y los políticos son capaces de todo con tal de mantener el poder, como sucede actualmente en el priismo estatal en donde el cachorro Figueroa Smtny arremete en contra de sus compañeros de partido.
Polilla… Que 2 y 3 de noviembre competencia de descenso rápido de ciclismo en Taxco… Que ya solamente le quedan dos meses al gobernante taxqueño para transformar Taxco, dijo que en tres meses lo haría… Que por las nubes los precios del pan y aditamentos para las ofrendas de muertos… Que este lunes entregan los certificados de vivienda a los periodistas beneficiados… hasta mañana.
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