Costa Chica de Guerrero.- Fue en Cruz Grande. La euforia se tentó a flor de piel. Sentimientos  encontrados de alegría fueron el marco de una gira de trabajo en la que se evidenció el antes y después. Ésta región ajada del Sur de México es la Costa Brava, la que bien puede pintar una raya  en el tiempo: Antes de Ángel Aguirre nada fue igual.

Miel sobre hojuelas a un gobernador declarado “hijo predilecto de la Costa Chica” por el mismísimo rector de la Universidad Autónoma de Guerrero. Música, porras y apapachos. Niños y jóvenes felices. Muy felices en ésta querida tierra costachiquense.

El gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero,  llevó a cabo ayer una emotiva como provechosa gira de trabajo por Barra Vieja, en Acapulco; Las Vigas, San Marcos y Cruz Grande (Florencio Villarreal), donde entregó lo mismo reconocimientos a restauranteros que apoyos a ganaderos y cooperativas pesqueras y edificios escolares a jóvenes. Pero, sobre todo, llevó felicidad a los pobres. Tal vez a los mas pobres.

En Barra Vieja el gobernador entregó reconocimientos a los restauranteros que participaron en el Festival del Pescado a la Talla. Le acompañó el presidente municipal Luis Walton Aburto quien fue testigo del decir de los restauranteros. Ahí dejó establecido el compromiso con los habitantes de Barra Vieja para pavimentar uno de los accesos al lugar turístico.

Al entregar estímulos económicos y reconocimientos a restauranteros de Playa Bonfil, Barra Vieja y San Andrés Playa Encantada que participaron en el concurso de pescado a la talla, el gobernador Ángel Aguirre Rivero vaticinó que para noviembre y diciembre, el puerto al igual que hace un año, estará completamente lleno.

A nombre de los restauranteros, Valentín Palacios González agradeció la visita de Ángel Aguirre Rivero a esta zona de Acapulco para refrendarles su cariño, apoyo y solidaridad del gobierno estatal.

---  “… a usted no le importa llenarse los pies de arena”, le dijeron al gobernador.

 

LAS EMOCIONES

EN LAS VIGAS Y

CRUZ GRANDE

 

Mañana de contrastes. Fue emocionante palpar el sentimiento de afecto  al gobernador en su tierra, la Costa Chica, la Costa Brava.

La alegría de jóvenes de la preparatoria 21, de la Universidad Autónoma de Guerrero en Las Vigas, San Marcos,  no fue tal como la de los chiquitines de la secundaria general “Miguel Hidalgo y Costilla” de Cruz Grande. Allá fueron parcos. Acá se desbordaron. Allá declararon al gobernador “el primer universitario de la Costa Chica”, acá se le entregaron.

 

EL PRIMER GANCHO A

LOS ALCALDES PÍCAROS

--- “…algunos (no todos, aclaró)se llevaron hasta el papel de baño”, dijo el gobernador en Barra Vieja.

--- “… hubo algunos (no todos, otra vez aclaró) que hasta los motores de las patrullas se llevaron”, dijo, en Las Vigas y Cruz Grande refrendó: “pero habrá investigaciones. O devuelven lo que se llevaron o se atienen a las consecuencias”

DE PAISANO

A PAISANO

Fue en Las Vigas donde el rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, Alberto Salgado,  declaró a Ángel Aguirre Rivero “el hijo predilecto de la Costa Chica. “Cuando concluyó su periodo como gobernador interino nos preguntamos: cuándo habrá otro gobernador como Ángel Aguirre?” dijo a la concurrencia para responderse a si mismo:

--- “Pero volvió. Y hoy los universitarios tenemos un gran compromiso con él. Porque no hay otro como Ángel Aguirre. Porque el programa de gobierno pasa por la UAG… porque…”. Habría seguido a no ser por las fanfarrias del chile frito.

El gobernador correspondió a su paisano, quien es oriundo de Cruz Grande: “Coincido con el rector. Hay un gobernador orgullosamente de la Costa Chica”.

Y enumeró las obras. Hizo destacar su tesón por concluir la carretera a cuatro carriles de Acapulco hasta Cuajinicuilapa y Ometepec. Anunció la construcción de un Instituto Tecnológico Superior en San Marcos, la Unidad Deportiva y entregó ahí mismo un microbús para la unidad de enfermería de la UAG además de solicitar a los universitarios que hagan la petición para otorgar un premio al mérito civil a Ascencio Villegas Arrizón, rector con licencia que convalece de terminal enfermedad.

Y habló Ángel a la multitud. Y vino la algarabía:

---“¿Hay madres solteras aquí?”, preguntó. Un si masivo le respondió.

--- “A ver, por acá las solteras, por acá las viudas, por acá las dejadas… y por aca las arrechas”. El frenesí se desbordó.

Y preguntó: ¿quiénes son Las que trabajan?: las mujeres. ¿Quiénes son cariñosas?: las mujeres. ¿Quiénes son mas honestas?: las mujeres. ¿Y quiénes son mas arrechas…? Fue el tono. En Las Vigas como en Cruz Grande. Le festejan los dichos. Le aplauden cada frase. Se le entregan.

 

EN CRUZ GRANDE

Pero en Cruz Grande fue mas emotivo. El contraste es inmenso. Ahí enfrente se ven prados regados con agua. Verdes pastos cruzados por calles pavimentadas. Todo bardado. Es la región militar que contrasta con la miseria del pueblo de enfrente, donde se comen tortitas de camarón aderezadas con el polvo de la calle. Aquí vive gente humilde y trabajadora.

Aqui se repitió la frase: “algunos se llevaron todo”. Y vino el recuerdo de Fulgencio Garibo. A la entrada a la cabecera se ven los arranques del hospital regional de la Costa Chica. Los predios estuvieron invadidos apenas por unos doscientos seguidores del pícaro ex edil. Simularon una invasión en terrenos donados para la construcción de un hospital regional.

--- “Pero les dijimos o se van o les aplicamos la ley”, dijo el gobernador. “Y se fueron”.

La emoción caló mas acá, en lo que fueron predios de Javier Manzanares. Ahí   antes hubo un jacal construido a base de huesos de palapa y láminas de cartón. Hoy es distinto. Esa diferencia hizo a los niños gritar de felicidad.

--- “En mi campaña ofrecí una escuela secundaria. Y ya la tienen. ¿Cómo habría de volver si mi palabra empeñada no hubiese sido cumplida?”, dijo para luego dejarse querer.

Lo apapacharon. Le aplaudieron. Le echaron porras. Le hicieron vallas. Le hicieron bailar aquella canción de Margarita, La Diosa de la Cumbia”: “… no te asombres si te digo lo que fuiste…“, al ritmo de la zumba.

¿Y cómo, pues? ¿Cómo no le van a querer?  De aquel jacalón nomas queda la foto. Hoy se levanta un edificio cómodo. “Tienen aire acondicionado, jefe”, comenta un joven eufórico que busca la fila para pedir una mochila.

 

LAS OBRASENTREGADAS

En Las Vigas inauguró el edificio que alberga la Unidad Académica de la Preparatoria Número 21 de la UAG y entregó escrituras a personas de bajos recursos económicos. Entregó al presidente municipal de San Marcos, Gustavo Villanueva Barrera, recursos por el orden de los 400 mil pesos para reparar las luminarias del boulevard del lugar y más 500 mil pesos para obras diversas del municipio. Anunció la donación de una pipa, un camión de volteo y una patrulla para mejorar la seguridad. Anunció también la ampliación a 4 carriles de la carretera Acapulco - Ometepec y Cuajinicuilapa, la construcción de un Instituto de Educación Superior para San Marcos y una Unidad Deportiva para las Vigas.

 

En Florencio Villareal (Cruz Grande), entregó el edificio de la escuela secundaria “Miguel Hidalgo y Costilla”, donde se invirtieron 20 millones de pesos.

 

En materia de Desarrollo Rural, el titular de la dependencia, Humberto Zapata Añorve informó que dentro del programa a la inversión para equipamiento e infraestructura se han invertido más de 3 millones de pesos tan solo para San Marcos, donde se entregaron apoyos para 5 sociedades cooperativas de la Laguna de Tecomate Pesquería y con una inversión federal de 4 millones de pesos se dará inicio a la elaboración del estudio de factibilidad y de impacto ambiental para fortalecer dicha laguna.

 

Asimismo con PESA- Guerrero Cumple se brinda atención a 559 familias de 18 localidades de alta y muy alta marginación con una inversión de más de 3 millones de pesos, mientras que para Cruz Grande, con el mismo programa se brinda apoyo a 378 familias de 16 localidades con una inversión de más de 3 millones de pesos.

 

¿CÓMO NO QUERERLE?

 

En Cruz Grande sí hubo un antes y un después. Nomás vemos foto de la secundaria de bajareque de antes y las aulas con aire acondicionado y preguntamos con sinceridad: ¿Cómo no le van a querer?