(De chile, de dulce, de amor y contra ellos)
''Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento y ciencia brotan de sus labios. El reserva su ayuda para la gente íntegra y protege a los de conducta intachable'': Proverbios 2:6-7.
Yo no sé sí a algunos de mis 13 lectores de lujo, o de mis 497 detractores les pase lo que a mi, pero neta, neta, no le creo ¡nada! al pedorriano Andrés Manuel López Obrador y el cuento ése de su República amorosa.
A decir la neta, antes tampoco le creí, ni siquiera cuando gobernaba la capital de mi México lindo y querido y hacía alarde de sus desplantes harto belicosos.
No se qué exactamente sea, pero hay algo en él que no me late y nunca me ha latido.
Digo, tampoco me las quiero dar de pitonisa- ¡líbreme Dios!- pero con don Nenguito me pasa exactamente lo que me pasaba con el maridín de doña María Martha Sahagún y lo mismito que también me pasó con Zeferino.
Núnca ninguno de los mencionados me inspiró la menor confianza como para darles mi voto. Y no me dejaran mentir, los que han leído por chilenero gusto o sin querer queriendo cada una de mis entregas desde endenantes, que no fueron pocas las veces que me sorrajé escribiéndo y suplicando tanto a la paisanada pozolera como a la cuatitud azteca en general, que se pusieran bien viques y no se fueran con la finta, pero la exacerbación radioactiva y los cuasi enfermizos afanes de un cambio, fueron el orígen para los apentontamientos masivos en cada caso y ya ni llorar es bueno.
Creo que no soy la única atufada en ésta carrera presidencial versión 2012. Digo, estoy consciente que de los 3 aspirantes a Precisos de mi tenochca país, no se hace uno; pero no soy la única que puede jurar ante un altar que el de Macuspana representa un peligro para México.
El otro atufado es el escritor e historiador Francisco Martín Moreno, autor del libro ''México Negro'', quien hace unos días escribiera una carta abierta al Pejito ahora cariñosito y que empieza así:
Querido Andrés Manuel:
No existe ningún mexicano, medianamente sensato, que no esté de acuerdo con tu tesis ''Primero los pobres''...¡¡¡Claro qué primero los pobres!!! ¿quién puede oponerse a semejante proyecto político y social?.
Todos coincidimos en la necesidad inaplazable de rescatar a los marginados, sólo qué yo no coincido contigo en las estrategias que has planteado para rescatarles de la miseria.
Entiende que la única célula generadora de riquezas es la empresa y los empresarios, a los qué tú llamas ''hambreadores del pueblo'' o ''parásitos sociales'', pero ellos son agentes operadores de bienestar.
Mientes. Todos coincidimos con el fin pero la mayoría no está de acuerdo con tu método. Se vio en las urnas. Ni partiendo el sueldo de los funcionarios, ni evitando la corrupción que devora lo mejor de nuestro país, podremos generar la suficiente riqueza para crear los empleos que requiere México. Tu diagnóstico está equivocado.
Tú no representas a la Izquierda, sino al más catastrófico populismo, del que ya no quiero jamás volver a acordarme. La Izquierda era la de Mitterand, la de Felipe González. Es la de Bachelet; a diferencia de la supuesta izquierda de de Chávez o de Castro, quien ha impuesto la felicidad a punta de bayonetas. ¡¡¡ERES UN PELIGRO!!!
Un gobierno encabezado por ti jamás creará todos los empleos que se necesitan en nuestro país; ni extinguirá las mechas encendidas, ni impulsará la recaudación tributaria indispensable para que un gobierno aumente significativamente el presupuesto de Desarrollo Social. Nadie con dos dedos de frente podría aceptar que tus tésis económicas ayudarán a la capitalización de las empresas, ni estimularán la capacitación tecnológica. Tampoco ampliará los mercados, ni estimulará la competitividad en el mercado internacional.
Uf, pregúntome yo...¿le sabrán algo a don Manuelito..o nomás le estarán hablando al tantéo?
Pero sigamos la lectura de tan interesante misiva.
'No tienes ningún derecho en detener la inversión extranjera. Ni la doméstica, qué tanto necesitamos para prosperar. No tienes justificación para espantar a los capitales extranjeros que vienen a construir un México mejor.
Careces de elementos -núnca los tendrás- para fomentar el odio entre los mexicanos, ni para polarizar éste país, ni para crear trincheras entre todos nosotros únicamente para dividirnos: la única condición en que los mexicanos hemos sido históricamente derrotados.
Ay don Pancho Martín, neta que yo lo acompaño en su patrióticos sentimientos, pero coincidirá usted con ésta chincualuda paloma costeña, que no hay peor ciego que él qué no quiere ver; ni peor sordo qué el que no quiere oír.
Es por esto que tomé como referencias los fenómenos Fox y Z, cuyos efectos apentontadores fueron altamente radioactivos. Insisto. Vuelvo y repito. No le creo al Peje, ni la ''O'' por lo redondo. Mucho menos me trago sus choros amorosos.
Digo, si Andrés Manuel hubiera aceptado a Cristo como su Señor y Salvador, arajo, entónces si yo no dudaría de su transformación pues la Biblia nos enseña que si alguien está en Cristo nueva criatura es; pero no me trago sus cuentos y mucho menos sus chafaltrafas puestas en escena, como las actitudes ''obispales'' que tuvo con el puño de querreques con tufo a pedorrianos ometepequenses, donde aparte de los ''amorosos'' apapachos, también les suministró ''amorosas'' tocadas de choya...je je je lo único que le hizo falta fue una pila bautismal y darle a más de uno su cachetadita, ya fuera para obsequiarle ''amorosa'' e izquierdosa confirmación o de plano pa' despertarlos de su sueño seductor.
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