Por Noé Mondragón Norato Foto: http://www.revistacostabrava.com/
Para el recién estrenado coordinador de los diputados locales del Morena y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Alfredo Sánchez Esquivel, el tiempo es su principal enemigo. Es decir, no podrá en tan sólo siete meses, recomponer todo lo que fue literalmente, tirado a la basura por sus antecesores. Es cuestión de pulsar los pasivos políticos irreversibles que arrastran quienes lo antecedieron para entenderlo mejor.
MISMA SIMULACIÓN. -El problema de los diputados locales del Morena que ganaron la elección de 2018 gracias al arrastre electoral de AMLO, es que llegaron a improvisar y aprender. Lo cual confirma que el relevo generación a ciegas no sirve de nada. No al menos a una entidad con los niveles de atraso y marginación como Guerrero. Hay lecturas elocuentes al respecto:
1.- De entrada, el primer presidente de la Jucopo, Pablo Amílcar Sandoval, prometió dos cosas imposibles dada la cultura política anquilosada y de corte caciquil que prevalece inalterable: bajarle el salario al gobernador. Y recortárselo también a sus propios compañeros legisladores. El cierre de pinzas de las fracciones legislativas del PRI-PRD-PAN y partidos bonsái, lo dejó sin capacidad de tomar decisiones en la materia. Terminó quedándose estático y esperando a que el presidente López Obrador tomara posesión para nombrarlo “super delegado”, una vestimenta que tampoco llenó. Le quedó demasiado grande.
2.- Su relevo en la Jucopo, el igualteco Antonio Helguera Jiménez, se convirtió en la prolongación de Pablo Amílcar en virtud de ser un cuadro político por él recomendado. Apenas llegó, se dedicó a dilapidar el presupuesto legislativo. Las cuentas nunca le cuadraron y los “ahorros legislativos”, fueron empleados para beneficiar en la gestión a los diputados del Morena “amigos”. Sobre todo, aquellos afines al grupo político de Pablo Amílcar.
En los hechos, Helguera fue el diputado morenista que más tiempo acumuló en la presidencia de la Jucopo.
Curiosamente, y tras acumularse tres intentos para destituirlo por parte de sus propios compañeros de bancada, el actual presidente de la Jucopo, Alfredo Sánchez Esquivel, firmó un documento ―respaldado por otros ocho diputados de su partido―, que clamaba por la permanencia de Antonio Helguera y desconocían la designación de Jesús Villanueva Vega quien, pese a ello, tomó protesta el 14 de enero de 2020. Helguera fue el más fiel representante de las inercias y los continuismos: declinó atizarle al trabajo legislativo que marcaría la diferencia con anteriores legislaturas priistas y perredistas. Y apostó por la sumisión política de valores entendidos con el gobernador Héctor Astudillo.
3.- Fiel al conocimiento de los resortes políticos que mueven las relaciones de poder en Guerrero, derivado de su pasado como autoridad electoral, Jesús Villanueva Vega, se dedicó madurar y darle forma a una agenda legislativa que corriera por los rieles de la incompetencia. Y de esta forma, todo el rebaño morenista se dedicó a hibernar.
Durante el año que estuvo al frente de dicha responsabilidad, no se generó ni una sola iniciativa de alto impacto para la sociedad guerrerense, hambrienta de resultados. Desde luego, ninguna reforma que pugnara por la verdadera división de poderes.
Es más: los diputados locales del Morena se sometieron a lo que proponían e imponían sutilmente, los diputados locales del PRI y PRD. También, a lo que mandara el inquilino de Casa Guerrero. Les tomaron la medida.
4.- El diputado Sánchez Esquivel no podrá hacer nada en siete meses. Y menos, en temporada electoral. No meterá a revisión el desempeño de sus tres antecesores, sobre todo en materia financiera. Se anticipa que los diputados del Morena, encarrerados por reelegirse o cambiar la camiseta de diputado local a la de alcalde, se ausentarán de las sesiones legislativas. Sánchez Esquivel asumirá como árbitro en una cancha sin jugadores. Porque los diputados locales del Morena aprendieron muy bien. Pero los vicios del PRI, PRD y PAN.
HOJEADAS DE PÁGINAS…El que no ha dejado de moverse, pese a situarse en el cuarto lugar de la encuesta del Morena que reveló como ganador al Toro Cercado, Félix Salgado, es el ex edil de Acapulco, Luis Walton Aburto. Su proyección es que la dirigencia del Morena quite a Félix la candidatura, y por la disputa irreconciliable con Pablo Amílcar, entre él como el tercero en discordia. Los rescoldos políticos amenazan con avivar el fuego.
Hay 361 invitados y ningún miembro en línea