En la coyuntura de la entrega-recepción del gobierno estatal, el gobernador electo, Héctor Astudillo Flores, comenzó literalmente, a mostrar sus armas políticas. Es decir, algunos de los personajes que lo acompañarán en el primer tramo de su gobierno. Es cuestión de ubicarlos para entender el estilo personal de gobernar que ya comienza a configurar.
LOS AGRACIADOS DE ASTUDILLO.- El priísta Héctor Astudillo, arrancará su gobierno con algunos cuadros políticos que se la jugaron con su proyecto. Pero que no dejan de meter cierto prurito. Hay que verlos:
1.- El ex diputado local y ex coordinador de fracción legislativa tricolor, Héctor Apreza Patrón, se anotó en la lista de facto. Trasciende que dicho personaje va directo a la Secretaría de Finanzas, pese a que su perfil sea de economista y no de contador público. Pero tiene su virtud. Porque, pese a emerger e identificarse inicialmente, como un cuadro político del ex gobernador René Juárez Cisneros, Apreza se plegó al proyecto astudillista desde la elección de gobernador de 2005. Y con tumbos, altibajos y tropiezos –se recuerda por ejemplo, que titubeó y estuvo a punto de irse con López Obrador en la elección federal de 2006- se ha mantenido ahí. Se tornó confiable para Astudillo. A grado tal, que podría hacerse responsable de los dineros públicos de la entidad. Pero el problema de Apreza no será de control, sino de aplicación correcta de esos recursos. Apreza inauguraría con ello, una etapa inédita en su carrera política.
2.- Uno de los personajes que causó cierta sorpresa en la ceremonia de entrega-recepción, es el ex secretario general de gobierno en el interinato de Ángel Aguirre Rivero (1997-1999), Florencio Salazar Adame. La polémica rodea de algún modo, a este político guerrerense. Porque en la histórica elección federal de 2000, salió del PRI y le apostó todo su resto al proyecto del panista Vicente Fox. Con tan buen tino político, que ocupó la titularidad de la extinta Secretaría de la Reforma Agraria (SRA). Y se puso al frente del Plan Puebla-Panamá, que al final, fracasó en todas sus letras. Florencio terminó en el sexenio de Felipe Calderón, en la fría embajada de Colombia, antes de retornar a su terruño natal guerrerense. E incorporarse de lleno, al proyecto político de Astudillo. Salazar Adame, podría ser instalado de nuevo, como secretario general de gobierno, dada su experiencia en el manejo de dicha dependencia. Y si de siglas partidistas se trata, eso no parece importarle al gobernador electo. Porque ya asumió que su gobierno será de corte plural. Es decir, lo mismo incluirá a priístas, panistas y hasta perredistas. Lo asombroso y desconcertante en este último caso, sería que incorporara a su gabinete a David Jiménez Rumbo, dueño de la diezmada tribu Grupo Guerrero (GG) en el PRD.
3.- Finalmente, Astudillo placeó por anticipado a Tulio Samuel Pérez Calvo, un personaje que si bien está ligado familiarmente a la esposa del gobernador electo, Mercedes Calvo Elizundia, tampoco se le ha despegado en toda su carrera política. Tulio fue presidente municipal interino de Chilpancingo y cuenta con cierto plus político dentro de la administración pública. A él se le ubica eventualmente, como titular de la Contraloría estatal, una dependencia que resulta clave y contrapeso efectivo a la maiceada Auditoria General del Estado (AGE). Como sea, Astudillo ya mostró sus primeras armas políticas. Fue cuidadoso y calculó el terreno político. Porque no exhibió a todos aquellos personajes que se encuentran ligados a los grupos políticos del ex gobernador René Juárez y del influyente diputado federal, Manuel Añorve Baños. Pero que yacen en lo oscuro y agazapados, formados en la fila. Presionando a fin de obtener su respectiva rebanada de pastel. Son ellos los que van a despertar la verdadera polémica.
HOJEADAS DE PÁGINAS…En donde existe honda preocupación, es en la Secretaría de Seguridad Pública, pues el Consejo Estatal adeuda cantidades millonarias a proveedores, muchos de los cuales ya evalúan demandar al gobierno estatal, ante ese agandalle financiero. El gobernador Rogelio Ortega Martínez, está obligado a prestar atención al uso faccioso que se le está dando a los dineros en esta Secretaría. Por el bien de su feneciente administración.
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