La soberbia es parte de su personalidad, sentir que nadie lo merece lo hace endeble pero ocupar un cargo público lo ha enloquecido. Héctor Acevedo Rivero enfrenta hoy en el Programa Nacional de Lectura (PNL) lo que siempre habíamos venido denunciando. El desprecio de los trabajadores mismos que son tratados con la punta del píe y les exige cual rey frustrado que le rindan pleitesía en un ambiente hostil que él mismo a provocados con sus acciones reprobables.
El muy galán se la pasa en los restaurantes contándole sus penas a los meseros e incondicionales con quienes se acusa de que la prensa lo está golpeando porque no les ha invitado unos cartones de cerveza que le pidieron algunos líderes del gremio. Acevedo en el 100% vociferó en contra de los periodistas a quienes señaló de borrachos.
Sin embargo días después su secretaria convocó a una conferencia de prensa para dar a conocer las actividades del Programa Nacional que llevarían a cabo en la Plaza Primer Congreso de Anáhuac. La respuesta del gremio fue manifiesta. Pocos acudieron al llamado, pero quienes lo hicieron se dijeron molestos porque Héctor Acevedo ordenó que mostraran sus credenciales, les sacaban una copia fotostática y a parte se anotaban en una relación de asistencia. Una vez en el evento les ofrecieron un café sin azúcar, sin pan y lo peor fue cuando les sirvieron el desayuno.
Huevo en chile verde en una taza para caldo, frío, al igual que los frijoles…sin tortillas...ahí un joven fue improvisado como mesero que no sabía qué hacer mientras Héctor Acevedo se regocijaba en la mesa principal puesta con cinco sillas para los invitados especiales cuando en realidad éstos eran ocho y tuvieron que improvisar…Hoy los trabajadores piden su salida inmediata. La soberbia y el poder han enloquecido a Héctor Avecedo quien no encuentra como tranquilizar a la base trabajadora que se dice no estar dispuesta a soportar el acoso sexual, la indiferencia y la falta de planeación del funcionario.
Los mismos empleados dicen que estuvo bien que Héctor Acevedo no llegó a ser secretario general del SUSPEG porque iba a terminar con los derechos de los trabajadores y buscaría solo beneficios personales. Los trabajadores del PNL ya no lo aguantan, lo califican como un tipo irritable, intratable, arrogante y poco ético.
El único lado bueno de Héctor Acevedo como director del Programa Nacional de Lectura, es que sí aprendió a leer bien…pero la carta de los restaurantes incluso se sabe el menú por ejemplo: en el 100 % natural sin ver la carta pide su jugo verde que lleva, sábila, epazote (para las lombrices), jugo de naranja, apio, perejil y guayaba para que amarre, después se pide una deliciosa, que consiste en yogur con fruta en un copa debidamente detallada y al final se toma su café….nada mal…lo mismo pasa cuando va al vip’s, al señorial, la mansión y a todos los demás.
Los meseros le preguntan ¿lo mismo señor?...y él contesta –sí, pero doble porque hoy tuve mucho trabajo…jajajajaja….mientras los trabajadores le denuncian falta de planeación y le exigen su renuncia. Y es mejor que se deje de calenturas y deje de pensar en el SUSPEG.
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