*Felicidades Jeremías Marquines (El Viejo Lépero), por el premio nacional a tu poemario “Acapulco Golden”. (Debes las chelas con Josué)

 

Ernesto Aguirre Gutiérrez ha ido a todas. Negoció con una fracción de la base sindical del SNTE. Luego con los de la CETEG. Los maestros volvieron a clases. Se conjuró el paro del magisterio que exige seguridad pública. Algo pasó. A las dos semanas otra vez lo mismo: los maestros exigen seguridad, cese a chantajes y un alto a las cuotas que, dicen, les  impone el crimen organizado.

 

En la región de La Montaña, lo mismo que en Acapulco, padres de familia exigen maestros que atiendan a sus niños. Se manifiestan en la playa, lo mismo que a las afueras de Casa Guerrero. Ernesto negocia. Tiene éxito. Algo pasa. A las dos semanas otra vez lo mismo. Los padres y niños toman la Autopista del Sol.

La joya de la corona de los conflictos en Guerrero: Ayotzinapa. Hubo tres muertos. Intervino la CNDH. Hay dos presos por los que policías bloquean la Autopista del Sol. La PGR inicia averiguaciones en contra de 70 funcionarios de la procuraduría estatal por evasión de reos. Guerrero se convulsiona. Al final de dos largos meses aparece el peine: los maestros no querían dar clases. Los alumnos querían clases. Otra vez los maestros aparecen en la escena.

Cualquier estudiante de ciencia política, con mediano aprovechamiento, sabría hacer un análisis comparativo de personajes, acontecimientos y con  un cronograma simple llegar a una probable conclusión: en todos los conflictos que irrumpieron en Guerrero al inicio del maratón Guadalupe-Reyes aparece una constante: los maestros como la manzana de la discordia.

También harían una retrospectiva. Sabrían que los maestros en Guerrero, como en el país, obedecen a delgados, pero firmes hilos de control central. Ninguna hoja del árbol se mueve si Elba no sopla. Cuidado, sin embargo, cuando ella estornuda. Y aquí parece que no estornudó. Le ha dado impresionante gripe.

En Guerrero, al triunfo de la alianza contra el PRI, los funcionarios colocados en la Secretaría de Educación de Guerrero no responden a los intereses del poderoso SNTE. En Chilpancingo le entregaron oficina y control administrativo a un cetegista enemigo declarado de la maestra. En el resto de las regiones pasó lo mismo: opositores a la Gordillo se apropiaron de nóminas, adscripciones, pagos, descuentos y control de regiones o zonas escolares completas. Y eso es hacer enojar a la maestra. Eso calienta. Eso es causa de camorra.

Ernesto Aguirre podrá seguir, con su buena intención, pretendiendo  componer los conflictos magisteriales al reunirse con delegados sindicales y las bases. Con padres de familia. Con directores. Habrá maletas y mas maletas para que los profesores estrenen coches nuevos. Pero nada pasará. Elba fue despojada de lo que considera propio. Y lo quiere de regreso.

Lo que sigue es subir de nivel la negociación y llevarla al DF, a donde se mueve la mano que tiene los hilos del magisterio. ¿Acaso esa vieja alianza Aguirre-Elba Esther se ha roto? Les urge esa entrevista, antes de la llegada de las campañas que enturbiarán aun mas el clima político y social de la entidad. Urge la decisión para prevenir el estallido.

TRASCENDIÓ

QUE es fuerte la versión en el sentido de que Sofío Ramírez Hernández no logró convertirse en candidato al Senado de la República, por el PRD. Se sabe que serán Sebastián de la Rosa y Armando Ríos Piter los elegidos. Ya saben. Cosa de las encuestas y la negociación entre “Pejistas” “Ebrardistas” y “Chuchos” en el Distrito Federal. El PG vetó a Sofío; Ebrard respaldó a Ríos y “Los Chuchos” a Sebastián.

QUE el golpe dado por las tribus perredianas al grupo del gobernador Ángel Aguirre, al impedirle el acceso al Senado a su delfín, sería compensado con candidaturas a diputaciones federales en los cuatro distritos federales electorales reservados por la alianza de las izquierdas.

Pero ahí la puerca torcerá el rabo, como dicen en el rancho. Para lograr eso tendrían que convencer a los ganadores de las encuestas como Abelina López (zeferinista) para que decline por Rafael Aguirre Rivero, por ejemplo. O negociar con el PT la posición de La Montaña. O al alcalde de Ometepec convencerlo de abrir paso a los aguirristas. O cargar los dados en la nueva encuesta que harán en Chilpancingo, para sacar al diputado Salgado como ganador.

Aunque dejarán el camino libre al gobernador para meter candidatos a diputados locales (Ángel Aguirre Herrera, un ejemplo) y presidentes municipales,  se avizoran conflictos entre el aguerrido perredismo guerrerense y el grupo gobernante aliancista en Guerrero, que ya se percató que no es lo mismo ganar con el institucional y dócil priísmo que con las rebeldes  tribus del PRD. Aunque como piden dan y las cartas están cerradas ¿Quién y cuánto paga por abrirlas?

NUMERALIA

1)    A más de cien millones de pesos, asciende el adeudo que mantienen familias de municipios de la región de la Montaña con la Comisión Federal de Electricidad.

 

2)    Cinco de la tarde, es el horario fatal en que la CFE corta el servicio de energía eléctrica a esa región y lo reanuda a las nueve de la mañan del día siguiente.

 

3)    Los adeudos de los indígenas datan de cinco o seis años.

 

4)    Cantidad de focos de la mayoría de las casas de aquella región: uno a tres.

 

5)    Cantidad bimestral que la CFE pretenden cobrarles: entre cinco y cien mil pesos, dependiendo de los focos (no mas de tres).

 

6)    Principal causa argumentada por la CFE para cobrar hsta cien mil pesos al bimestre: que los indígenas dejan encendido su foco todo el día.

 

7)    Ingreso salarial máximo comparado entre indígenas de La Montaña y habitantes del Distrito Federal: hasta 30 mil dólares anuales en el DF y mil 800 dólares anuales en La Montaña.

PREGUNTAS QUE MATAN

¿Acaso el gobierno estatal no cuenta con un aparato de inteligencia capaz de elaborar análisis que le permitan solucionar los conflictos antes que éstos le estallen al gobernador? Parece que no. Parece que Ángel no tiene quién le informe.

QUE CONSTE

“Nada de qué avergonzarse” sobre los hechos en Ayotzinapa. Ángel Heladio Aguirre Rivero, gobernador de Guerrero