México • Manuel Añorve, alcalde de Acapulco, considera que un presidente municipal no puede gobernar blindado, porque se aleja de la gente.

Por ello, afirma que aunque toma precauciones, lleva una vida social normal:

 “Me encanta andar en las calles conviviendo, me gusta recorrer las colonias, supervisar e inaugurar obras”.

Aunque admite que en Acapulco hay pobladores con temor hacia la violencia, puntualiza que él es “un hombre con mano firme. Tomo decisiones, las analizo y asumo la responsabilidad de ellas y esta ciudad lo merece”.

Luego de afirmar que en la lucha contra la delincuencia lo único que no se puede hacer es bajar la guardia, Añorve insiste: “donde sea necesario aprieto, y aprieto bien. Por eso, el único temor que tengo en mi vida es a Dios”.

¿Se ha blindado el presidente municipal, toma más precauciones?

No, no tengo por qué esconderme. Es más, y perdona que te lo diga, soy hasta hiperactivo: me encanta andar en las calles conviviendo con la gente; me gusta recorrer las colonias, supervisar e inaugurar obras. No puede un presidente municipal gobernar blindadamente porque te alejas de la gente. Tampoco se vale que, sabiendo a lo que te vas a enfrentar cuando eres candidato, simple y sencillamente te encierres en tu oficina.

“Mis hijos viven en Acapulco. Hago una vida social normal y el domingo en las tarde se lo dedico a mi familia. Si algo me gusta es irme a un centro comercial, al cine, caminar en la Costera, ir a la playa. Soy un hombre que tomo mis precauciones normales, naturales, pero gobierno cerca de la gente. Y no es slogan, tú lo puedes constatar. No soy inalcanzable”.

¿Como se gobierna un municipio que parece ingobernable?

Ante los acontecimientos (de violencia) que se han venido dando, debo subrayar que la Costera, la franja turística está blindada. Los hechos lamentables, que no podemos negar, se están dando en las colonias populares. Pero cuando suceden, incluso fuera de Acapulco, muchos tienen como referencia a Acapulco y eso lastima al municipio.

Pero la gente tiene miedo, ¿cómo los alienta su alcalde?

Claro que hay ciudadanos que pueden estar con temor de que un acontecimiento pudiera lastimarlos. Pero nosotros estamos haciendo lo que nos corresponde: una relación directa con el Ejército, la Marina, las fuerzas federales y el estado. Desde el origen de la policía municipal tengo militares retirados que se coordinan perfectamente bien con la Sedena y la Marina. Tenemos retenes.

¿Qué salidas hay para Guerrero y Acapulco bajo las condiciones actuales?

Ésta es una lucha contra la delincuencia organizada que encabeza el presidente Felipe Calderón. Yo no lo estoy juzgando, digo que así se hizo. No hay estado del país que no tenga los problemas que se viven en Acapulco. No hay municipio en el país, el que me pongas, el más pacífico, entre comillas, donde no haya conflictos por narcotráfico.

“Ningún estado está exento de los problemas que tenemos ni tampoco ningún destino turístico. Lo que no podemos hacer es bajar la guardia. Por supuesto que hay futuro, por supuesto que tenemos que seguir construyendo el Acapulco y el estado de Guerrero que queremos”.

¿Contento y sin miedo?

Soy un hombre con los pies en la tierra y con mano firme. Tomo decisiones, las analizo y asumo la responsabilidad de ellas y esta ciudad lo merece.

Esta ciudad no merece un presidente municipal que se esconda, uno que deje pasar las cosas. Entiendo la problemática que me tocó a mí vivir en esta administración, que por cierto viene heredada de la anterior, pero que no estoy haciendo a un lado mi responsabilidad y donde sea necesario aprieto y aprieto bien. Por eso, el único temor que tengo en mi vida es a Dios.